En la última cumbre global por el clima, Argentina puso el tema en debate.
A la agenda ambiental le encanta mezclar palabras conocidas que juntas despiertan sentidos nuevos.
Pero: ¿qué es el canje de deuda por acción climática?
Un acuerdo entre países que permite crear "mecanismos de pago por servicios ecosistémicos e instalar el concepto de deuda ambiental", como dijo Alberto Fernández en la COP26.
De llegar a un acuerdo, deudores y acreedores tienen que marcar la cancha. Por ejemplo: ¿pagamos y nos dan tecnología para la transición energética? ¿Nos condonan la deuda?
La idea va enganchada a otro gran asunto pendiente: el norte global se comprometió a financiar acciones de mitigación y adecuación de los países en desarrollo, eso pactaron en el Acuerdo de París.
A muchos científicos y ambientalistas esta discusión les hace ruido. La linkean con otra discusión histórica, la del canje de deuda por naturaleza.
OK, somos acreedores ambientales. Pero, ¿qué precio tiene esa deuda?La discusión puede alimentar decisiones de corto plazo tomadas ante las urgencias que imponen el hambre y la pobreza.