Taller de perfiles

Perfiles01

Taller de perfiles a cargo de Mónica Yemayel.

 

 

No hay una definición exacta qué diga que son. Ni existe un manual de instrucciones que diga cómo se escriben. Tal vez algo de eso explique la seducción que ejercen los “perfiles” sobre quienes leen y escriben. Hay, en esos artefactos periodísticos-literarios, una tensión entre la libertad de la creación y sus límites. Porque: ¿cómo se cuenta una vida cuando es real y no de ficción?  

 

Y cuando hay tantas diferencias que lo cambian casi todo.

 

Porque no es lo mismo un perfil por encargo y fecha de entrega que un perfil que se elige atraído por algún tipo de emoción; un perfil escrito en primera persona que uno que toma distancia; no es igual tener acceso a quien se perfila  que no tenerlo; que sea un perfil individual que uno coral; o que un lugar se transforme en el centro de un perfil; o el perfil de una celebridad –a quien queremos descubrir haciendo cosas comunes- que el perfil de una persona común haciendo algo extraordinario.

 

La propuesta a los y las participantes: leer, discutir, entusiasmarse, escribir.

 

Leer: con la intención de identificar, analizar y discutir diferentes recursos y miradas de autoras y autores que han hecho del perfil un género literario. Se elegirán perfiles y fragmentos de libros (Plano Americano, Los Malos, Crónica 1 y 3 de la UNAM, 38 Estrellas, La hermana menor, Opus Gelber, Más afuera, entre otros). También quedará abierta la posibilidad de lectura de algunos perfiles propios publicados en Gatopardo y Anfibia para discutir ciertas decisiones en retratos de muy diferente tipo (El ojo extraterrestre; El ministro marxista; El león sin su corona; Mickey es un jubilado con hambre; Los detectives de Borges).

 

Escribir: La idea es que cada quien pueda compartir su proyecto en el estado en que se encuentra: una idea vaga, una idea certera, un arranque, un boceto, un perfil ya escrito, publicado o sin publicar. Si nada de eso hay, espero que el taller los lance a la búsqueda. Pronto.  

 

Los encuentros

 

Cada uno de los distintos tipos de perfiles implica tomar decisiones diferentes, poner en práctica técnicas distintas. En el taller analizaremos perfiles que encarnan cada una de estas posibilidades y discutiremos posibles guías de acción.

 

Momento 1: Entrevistar, investigar, salir de caza para atrapar todos los testimonios posibles y el material de archivo que sirvan para explicar quién es y quién no es el o la protagonista de la historia, para explicar cuándo, cómo y por qué se ha vuelto un personaje de interés, una persona con un mundo propio al que anhelamos acceder y revelar. 

 

Momento 2: Elegir, descartar, seleccionar, jerarquizar para -finalmente- comenzar a escribir. Escribir qué, escribir cómo, escribir para quién. Entonces: la mirada. El trabajo de construir un modo de ver y contar. Subjetiva y única, con esa potencia y riesgo, la mirada define el texto. Con la ambición de que se convierta para alguien en una pieza tan inolvidable como una buena novela o una canción.

 

Momento 3: La potencia del arranque, el condicionamiento de la primera frase. Estructura: movilidad sin perder claridad. La voz del perfilado o perfilada. Qué dice en la primera intervención. La voz del autor o autora. El blindaje más posiblemente perfecto. Mostrar y no declamar para emocionar. La secuencia y dosis en la entrega de información. Atracción, misterio, tensión, pero sin generar falsas expectativas.

 

Momento 4: La coherencia interna del texto y de lo que se quiere decir. La epifanía. El riesgo de poner en peligro el verosímil. La elegancia de los conectores. La autoedición. El pulido interminable. Los límites: qué línea está de más. La última versión. Retratar a alguien tiene consecuencias. No se sale indemne de ese proceso y, por eso mismo, escribir un perfil es aceptar el pacto con unas reglas y principios que cada autor y autora construyen para sí. El buen editor y editora como esa red inestimable. Punto final.