Rodrigo Rojas es chileno pero made in Lima en el año 1971. Aprendió a leer y escribir en Argentina, país que dejó a los nueve años. Cada vez que vuelve, aunque sea de paso, cumple el ritual de comprarse un cuaderno Rivadavia de tapas duras porque el olor de ese papel sigue siendo el mismo de su niñez.
Estudió periodismo pero se dedicó a escribir poesía. Ahora coordina la Cátedra Abierta en homenaje a Roberto Bolaño en la Universidad Diego Portales y pronto publicará su cuarta colección de poemas en la editorial Garceta.
Es Master of Fine Arts in Creative Writing, especialización en poesía New York University (2003) y Doctor en Literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Ha publicado los libros de poemas Desembocadura del Cielo (Cuarto Propio 1996); Sol de Acero (Cuarto Propio 1999); Grand Central (Foro de Escritores, 2005) y el libro de ensayo La Lengua Escorada: la traducción como resistencia en cuatro poetas mapuche (Editorial Pehuén 2009).
Ademas de haber vivido en Perú Chile y Argentina, también lo hizo en Sudáfrica en pleno appartheid y en Israel justo antes de la primera intifada. De todos estos países prefiere a todas luces Wallmapu.
En su velador el libro más a mano es de Patrizia Cavalli. La poeta destronó a sus otras lecturas porque le ayuda a comprender a su madre y, por consiguiente, gasta menos en pastillas.