Georgina García entiende que la fotografía requiere, ante todo, compromiso. Cuando comenzó, sintió que la imagen la ayudaba a sintetizar aquello que quería contar. Por eso, dice, resignó su vocación como escritora. Eligió bien: su obra ha sido expuesta en Museos y Festivales Nacionales e Internacionales y ella logró, a partir de sus experiencias visuales, resignificar una gran cantidad de temas y darle voz a muchos otros. Cree haber tomado decenas de miles de fotos en su vida. De todas ellas, expondría solo 50 en una muestra.
Se formó en el Fotoclub Buenos Aires y se especializó en fotoperiodismo en la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA). En paralelo, realizó talleres con Martín Acosta, Julio Menajovsky y Don Ripka. Colaboró en agencias, diarios y revistas nacionales e internaciones, entre ellos: Página 12, La Nación, Télam, Brazil Photo Press Brasileiros y Arte Brasileiros.
Antes de quedarse dormida Georgina recorre en imágenes todas las actividades de su día, como si fuera un corto cinematográfico.