En 1992 Gabriela viajaba sin rumbo fijo desde hacía algunos meses. En 1992 llegó a Caracas. En el Centro Cultural Teresa Carreño visitó una muestra de Robert Capa. Recuerda que ese día hizo sinapsis y definió su vocación.
Un par de años después estudió con Eduardo Gil y en los años siguientes su formación se complementó entre la fotografía, lo audiovisual (estudió en el MALBA y con Rodrigo Alonso) y el arte contemporáneo.
Ha colaborado con Pagina/12, Revista Nuestros Hijos, Revista XXI, Revista Puentes, Comisión Memoria Argentina, Diario de Noticias (Portugal), Revista América Economía (Chile), Revista Literaria Arcadia (Colombia) y la Agencia de Noticias de China Xinhua, entre otros medios.
Desde 1996, sus obras fueron parte de muestras grupales e individuales. En 2007, con la muestra “El Cuerpo Diseñado”, llegó a uno de los espacios porteños más deseados por los fotógrafos: la Sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta. Un año antes, había exhibido las imágenes de “Quirurgia” en el Espacio Ecléctico, Buenos Aires. No es un tema menor dentro de su obra: es hija de un cirujano.
Casi al mismo tiempo, Gabriela comenzó a diversificar su formación: estudió letras y gestión parlamentaria. Hoy, dice, la fotografía es como una buena amiga, a la que visita muy de vez en cuando, para recordar cómo era el pasado.
