Luz Espiro se salvó de viajar a Disney a los 15 por la crisis de 2001. Cambió el regalo, años después, por un viaje a Sudáfrica. Al volver empezó Antropología en la UNLP, curiosa por conocer otras versiones sobre lxs africanxs. Aunque más que de los nuer no aprendió, dice. Con una beca fue a cursar materias a la UFMG en Belo Horizonte: historia de África, antropología visual, y otras. Se llenó de preguntas y a la vuelta buscó responderlas: eso la ayudó a terminar la carrera. En grupo realizó un documental amateur sobre la migración africana en Buenos Aires. Luego siguieron becas de investigación sobre la migración senegalesa en Argentina y dictado de clases. Volvió a Brasil para una pasantía en antropología visual en la UFRGS; viajó a Senegal, donde hizo trabajo de campo; y vivió un tiempo en Chubut, donde escribió su tesis doctoral sobre trayectorias laborales de migrantes senegaleses entre Argentina, Brasil y Senegal, que defendió en 2019 en la UNLP.